lunes, 12 de abril de 2010

La hipótesis de la Reina Roja


Desde que publiqué la primera entrada de mi blog ha pasado ni más ni menos que un año y siete meses, y a lo largo de su existencia he logrado publicado un total de 70 entradas (71 si contamos con la presente). Al igual que a mi amigo Gorzas, he tenido momentos de inspiración y momentos en los que he escrito truños que bien podrían haber salpicado la loza del Sr. Roca, pero bueno, todo el mundo sabe que no soy H. Christian Andersen, porque si lo fuera viviría en Odense y ahora mismo no estaría con un calor del copón sino helándome en Dinamarca. Aunque también es verdad que estaría muerto y el frío me sudaría los cojones un rato.

La cosa es, que durante todo este tiempo le puse el nombre que tiene al blog y mucha gente creerá que no tiene ningún sentido, que lo tiene pero es un chiste particular que sólo conozco yo, o alguna otra teoría más descabellada, pero la realidad es bien distinta. Quizás algún biólogo o alguien versado en ciencias de algún tipo y con gusto por la lectura se pasa de vez en cuando por mi blog, y sabe perfectamente de qué va el rollo, pero para los ajenos a todo este mundillo he decidido explicar de dónde viene tan singular denominación.

Si sois observadores os habréis percatado de que la dirección de mi blog es http://paradojadelareinaroja.blogspot.com , que el nombre de mi blog es en realidad "La Carrera de la reina roja" y que el título de esta entrada es "Hipótesis de la Reina roja". Creo que el nombre adecuado de la hipótesis es "La carrera de la Reina Roja", pero bueno, no seamos tampoco puntillosos.

La Carrera de la Reina Roja hace referencia (al menos en biología, y más concretamente en su apartado de evolución) a la hipótesis de que las especies están en continuo estado de cambio y evolución simplemente para mantenerse donde están (metafóricamente hablando), es decir, que las especies se mueven continuamente para no quedarse en la estacada. Ejemplos claros de ello pueden ser los casos de coevolución: El huesped a lo largo del tiempo (tiempo a escala geológica, claro) evoluciona y sufre cambios, algunos de los cuales le permiten defenderse o ser peor hospedador para el parásito, lo cual supone una clara ventaja frente a individuos que sufren peor la infección. Si el parásito no estuviera en continua evolución y no aparecieran mutaciones que contrarrestaran ese efecto, al final acabaría muriendo puesto que no podría parasitar al huesped y depende de él para vivir.

Evolucionar o morir, esa es la cuestión. Adaptarse a los cambios del entorno y lograr vivir con ellos. El nombre viene del fragmento de "Alicia a través del espejo" cuando la susodicha se haya en el país de la Reina Roja y se pone a correr junto con todo el mundo, hasta que se da cuenta de que todo a su alrededor sigue igual:

"Alicia miró alrededor suyo con gran sorpresa.

-Pero ¿cómo? ¡Si parece que hemos estado bajo este árbol todo el tiempo! ¡Todo está igual que antes!

-¡Pues claro que sí! -convino la Reina-. Y, ¿cómo si no?

-Bueno, lo que es en mi país -aclaró Alicia, jadeando aún bastante, cuando se corre tan rápido como lo hemos estado haciendo y durante algún tiempo, se suele llegar a alguna otra parte...

-¡Un país bastante lento! -replicó la Reina-. Lo que es aquí, como ves, hace falta correr todo cuanto una pueda para permanecer en el mismo sitio. Si se quiere llegar a otra parte hay que correr por lo menos dos veces más rápido."

Y eso es todo por hoy. Espero que os haya gustado la parábola, aunque en este caso no podría denominarse así porque el cuento original no lleva implícita la teoría, sino que en este caso la moraleja viene después. ¡Un saludo!

2 comentarios:

eρHedro dijo...

A mí lo que más me ha gustado es la referencia a mi amigo Lewis.

Anónimo dijo...

En 4º de ESO del IES Guillem d'Alcalà.
Después de leerlo, todavía no nos hemos enterado.

Felicidades, ahora nos lo va a explicar Pedro @pmiguel600k